¿Escuchaste hablar de la FASCIA MUSCULAR y quieres saber qué es, de qué sirve y como cuidarla?
Estás en el lugar indicado!! Sigue leyendo.
Aquí abajo te explicaremos qué es la fascia, qué hace y donde está. Básicamente te explicaremos todo lo que tienes que saber sobre ella!.
QUÉ ES LA FASCIA | Es un tejido conectivo fibroso que permite que los músculos se muevan libremente junto a otras estructuras y reduce la fricción. |
DONDE ESTÁ LA FASCIA | Está presente en todo el cuerpo. Se encuentra inmediatamente debajo de la piel, alrededor de los músculos, grupos de músculos, huesos, nervios, vasos sanguíneos, órganos y células. |
QUÉ ES LA FASCIA
La fascia es un tejido conectivo fibroso que está presente en todo el cuerpo.
Rodea y penetra todas las estructuras del cuerpo que se extienden de la cabeza a los pies.
La fascia es virtualmente inseparable de todas las estructuras del cuerpo y actúa para crear continuidad y unión entre los tejidos para mejorar la función y el soporte.
✔️ Tipos de fascia
Existen diferentes tipos de fascia, que varían en la composición o combinación de sus componentes, dependiendo de la parte del cuerpo donde se encuentren o de la función que tengan encomendada.
Los componentes característicos de la fascia, el colágeno flexible y extensible, que actúa como proteína estructural que da forma y la mantiene, y la elastina, que también da estructura y se caracteriza por su enorme elasticidad, no sólo están presentes en el tejido de la fascia, sino que realizan aquí su trabajo específico para el tejido.
Comparable a una goma elástica, el tejido de la fascia siempre vuelve a su forma original, pero sin aflojarse con el tiempo.
Aunque hay un acuerdo generalizado de que hay diferentes tipos de fascias, no hay una enumeración única.
Así, es normal escuchar que se habla de fascial superficial y fascia profunda.
Así, todo el aparato fascial del cuerpo humano podría dividirse a grandes rasgos en tres capas que tienen funciones diferentes.
Las fascias superficiales, situadas en el tejido subcutáneo, garantizan el movimiento de la piel, protegen las vías nerviosas, albergan los vasos linfáticos y las glándulas y, como almacenes de agua y grasa, protegen el tejido más profundo de la compresión externa.
En la región más profunda del cuerpo, las fascias conectan los músculos con los huesos como capas de tejido conjuntivo o como filamentos -en este caso, los tendones- y hacen posible así un movimiento dirigido y potente de las extremidades o de la cabeza en primer lugar.
Además, protegen a los grupos musculares individuales del roce entre sí, forman cápsulas articulares y, como los llamados ligamentos, aseguran la cohesión de los tendones de la misma dirección, por ejemplo en las zonas de las muñecas y los tobillos.
Además, como pieles altamente sensibles, envuelven los huesos individuales, las cápsulas articulares, los vasos sanguíneos y las vías nerviosas.
La tercera capa de fascia, también llamada capa de fascia visceral, es responsable de la estabilidad local de los órganos internos.
Permite que los órganos mantengan su posición dentro del cuerpo, pero prevé su desplazamiento reversible cuando sea necesario.
La movilidad de los órganos internos es una necesidad de la vida: en los accidentes que exponen al cuerpo a una compresión repentina, órganos como el estómago, el hígado o los intestinos ceden, se desplazan para evitar la presión y vuelven a su posición original.
El embarazo representa un proceso similar, aunque mucho más lento. También aquí los órganos ceden gradualmente su posición para dejar espacio a la vida en desarrollo. Todo esto ocurre de forma imperceptible y sin ninguna influencia negativa en el funcionamiento de los órganos.
Sin embargo, el uso de los términos fascia superficial y fascia profunda es considerado incorrecto por el Comité Federativo Internacional de Terminología Anatómica (FICAT).
Lo que no está en discusión (y nos interesa en este artículo) es la existencia de la fascia muscular, que es la que recubre a tus músculos.
Las 4 claves sobre la fascia:
❱ La fascia es una red de tejido conectivo en bandas que envuelve todas las partes internas del cuerpo desde la cabeza a los pies y lo fusiona todo.
❱ Permite que los músculos se muevan libremente junto a otras estructuras y reduce la fricción.
❱ Se puede encontrar inmediatamente debajo de la piel, alrededor de los músculos, grupos de músculos, huesos, nervios, vasos sanguíneos, órganos y células.
❱ La fascia está en todas partes. Biológicamente, es lo que nos mantiene unidos.
ATENCIÓN: No confundas fascia con aponeurosis, la membrana que tiene la función servir de inserción a algunos músculos esqueléticos.
QUÉ ES LA FASCIA MUSCULAR
☑ La fascia muscular es la membrana que recubre tus músculos.
Para entender de manera gráfica, qué es la fascia muscular, nos parece importante recordar algunos datos importantes sobre tus músculos.
Aunque cualquier persona ve a los músculos como una unidad (el biceps, el cuadriceps, los abdominales, etc), cada músculo esta compuesto por muchísimas fibras musculares, cuyas contracciones en forma conjunta generan los movimientos.
Las fibras musculares son las células que componen los músculos y tienen la habilidad de contraerse y relajarse en respuesta a los mensajes de nuestro sistema nervioso central.
Las fibras musculares de cada uno de tus músculos no están sueltas por tu cuerpo, sino que están recubiertas por fascia muscular.
✔️ ¿PARA QUÉ SIRVE LA FASCIA MUSCULAR?
Ya te explicamos de forma simple qué es la fascia, ahora intentaremos ayudarte a entender cuál es su función.
Tradicionalmente, se han señalado como funciones principales de la fascia muscular a las siguientes:
❱ La fascia sostiene los músculos juntos y los mantiene en el lugar correcto.
❱ La fascia separa los músculos para que puedan trabajar de forma independiente el uno del otro.
❱ La fascia proporciona una superficie lubricada para que los músculos pueden moverse suavemente uno contra el otro.
Sin embargo, en los últimos años se ha empezado a avanzar en otras funciones importantes.
Así, la fascia muscular podría contraerse, sentir y afectar la forma en que te mueves y responder al estrés en forma inconsciente.
Además, la fascia también es una fuente potencial de dolor.
En un interesante Estudio se investigó cómo el dolor lumbar que se origina en la fascia se expresa de manera diferente al dolor que se origina en los músculos y la piel.
En este estudio, los investigadores inyectaron un bolo de solución salina bajo guía ecográfica en la fascia o los músculos subyacentes.
Después de la inyección en la fascia, los participantes describieron la inyección como «tortuosa», «agotadora» y «agonizante».
Por el contrario, la inyección en el músculo se describió como «ardor», «entumecimiento» y «latido».
La fascia puede dañarse severamente en una lesión como el esguince de tobillo. ,
Por su parte, la rigidez y el engrosamiento de la fascia con el uso excesivo o alguna enfermedad puede dar lugar a inflamación crónica del tejido y dolor continuo.
EJEMPLO DE LESIONES DE LAS FASCIAS: El ejemplo más conocido de esto es la fascitis plantar.
COMO CUIDAR TU FASCIA
Los principales enemigos del tejido conjuntivo sano son la falta de ejercicio y -no hay que subestimarlo- el estrés.
El tejido conectivo debilitado pierde parte de su capacidad funcional. Las consecuencias son la incipiente degradación del cartílago articular, el aumento de la fragilidad de los tendones y la pérdida de elasticidad de los vasos sanguíneos.
En la búsqueda de la causa del funcionamiento inadecuado del tejido de la fascia, no debe ignorarse la situación emocional.
Pero el tejido de la fascia también sufre durante las actividades predominantemente sedentarias o durante una enfermedad prolongada, es decir, cuando hay poco movimiento.
Debido a la falta de movimiento, las fascias se enredan, se pegan o se endurecen, lo que provoca una libertad de movimiento limitada, a menudo acompañada de dolor muscular.
Debido a ese dolor, se adopta una «postura protectora», que empeora el conjunto en lugar de mejorarlo. Esto se debe a que la postura de alivio provoca una sobrecarga en otra parte, que a menudo también va acompañada de dolor.
La inactividad, las lesiones, pasar demasiado tiempo sentados y otros malos hábitos, puede generar que existan adhesiones entre las fascias del cuerpo
Estas adhesiones de la fascia, puede evitar y/o dificultar que los músculos se muevan libremente unos contra los otros.
Esto puede conducir a una rigidez o tensión que limita el rango de movimiento de tus músculos.
❱ Estiramientos y masajes
La realización de estiramientos adecuados, los masajes, y actividades como el yoga o pilates, puede contribuir a mantener tus músculos y su fascia en buen estado de funcionamiento y evitar estas adhesiones.
Sin embargo, es importante destacar que la fascia no responde igual que los músculos al estiramiento tradicional, por lo que se puede irritar cuando se estira demasiado.
Por ello, es recomendable no abusar de los estiramientos estáticos ni realizarlos en forma muy profunda.
Los masajes manuales o con foam roller, puede ser la mejor alternativa para quienes tienen problemas en sus fascias.
Estos son los mejores estiramientos del mundo.
❱ Consume colágeno
El colágeno es una proteína y es el principal componente del tejido conectivo en el cuerpo, entre ellos, la fascia.
El colágeno forma estructuras fuertes y/o flexibles dependiendo la forma en que se organizan estructuralmente.
Así, el colágeno le otorga estabilidad, fuerza y resistencia a una gran cantidad de tejidos del cuerpo y esenciales para los corredores, como ser: tendones, ligamentos y huesos.
El agua es un componente esencial del colágeno y por ello es importante consumir buenas cantidades de agua durante el día.
La gelatina es otra excelente opción.
Fascia y puntos gatillos
Un sobreesfuerzo agudo o crónico puede activar puntos gatillo en los músculos esqueléticos, el llamado síndrome de fascia muscular.
El síntoma principal es el dolor, que suele ser inespecífico. Este dolor está causado por un mal funcionamiento del músculo, que es consecuencia de los puntos gatillo activados.
Si estos dolores no se tratan -a menudo no se reconoce la causa intrínseca del dolor- se puede desencadenar una reacción en cadena con consecuencias de largo alcance. Una de las reacciones al dolor es el cambio de postura, lo que empeora aún más la situación.
Esta postura «incorrecta» somete a tensión y sobrecarga a los músculos de otras partes del cuerpo, lo que puede conducir a la activación de otros puntos gatillo, que a su vez pueden provocar disfunción y dolor.
En última instancia, esto puede provocar complejos cambios en la postura y la función motora, que a su vez activan los puntos gatillo. El resultado es un patrón de dolor muy complejo que puede causar graves déficits funcionales.
Así, los síntomas orgánicos como la opresión torácica o el dolor cardíaco también pueden indicar un síndrome de fascia muscular del músculo pectoral mayor.
Descubre más sobre los puntos gatillo, AQUÍ.
¿Por qué no había escuchado hablar antes de la fascia?
Durante mucho tiempo, las fascias y todo el aparato fascial fueron estructuras poco conocidas y poco exploradas.
El reconocimiento de sus extensas áreas de responsabilidad y de sus diferentes funciones, que van mucho más allá de la cohesión de las estructuras óseas en la zona articular o de la estabilización de los órganos, requirió primero la investigación de su anatomía
Referencias
Myofibroblasts and mechano-regulation of connective tissue remodelling. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/11988769
Fascia is able to contract in a smooth muscle-like manner and thereby influence musculoskeletal mechanics http://www.researchgate.net/publication/246541408_Fascia_is_able_to_contract_in_a_smooth_muscle-like_manner_and_thereby_influence_musculoskeletal_mechanics
Sensory findings after stimulation of the thoracolumbar fascia with hypertonic saline suggest its contribution to low back pain.
Visceral mobilization can lyse and prevent peritoneal adhesions in a rat model.
Anatomy of the deep fascia of the upper limb. Second part: study of innervation.
Clinical relevance of fascial tissue and dysfunctions. Current pain and headache reports