¿Sabías que conocer el MÉTODO RICE puede ayudarte a curarte más rápido de las lesiones?
Ante lesiones articulares, tendinosas y musculares conocer en que consiste el RICE puede prevenir complicaciones y ayudarte a sanar más rápido.
En este artículo te contaremos todo lo que tienes que saber sobre el MÉTODO RICE.
QUÉ ES EL MÉTODO RICE
RICE es una forma de tratamiento de lesiones cuyo nombre proviene de un acronismo para las palabras en inglés: «rest» (reposo), «ice» (hielo), «compression» (compresión) y «elevation» (elevación).
El RICE consiste básicamente en la realización de estas cuatro técnicas especialmente durante las primeras 48/72 horas de producida la lesión o ante lesiones crónicas cuando la inflamación se encuentra presente.
El método rice es útil para lesiones leves a moderadas.
Los médicos generalmente recomiendan el método RICE para:
❱ Esguinces y torceduras
❱ Golpes
❱ Otras lesiones de tejidos blandos
❱❱❱ Rest (Reposo)
El dolor es la señal de tu cuerpo de que algo está mal.
Cuando te lastimes es importante que te detengas y analices su gravedad.
En base a ello, podrás decidir si conviene aplicar esta fase del método o pasar directamente a la siguiente.
¿Qué queremos decir con esto? No todas las lesiones responden positivamente al reposo y muchas veces puede ser perjudicial para la recuperación.
Si el dolor es severo, además de visitar a tu médico, puede ser importante que hagas reposo.
No intentes seguir la filosofía «sin dolor, sin ganancia«.
❱❱❱ Ice (Hielo)
La aplicación de hielo en la zona lesionada durante 15/20 minutos cada 2/3 horas en la fase aguda de la lesión será una de las claves para las recuperaciones.
En duros entrenamientos (sin que exista lesión) ha sido demostrado que la inmersión en agua fría nos ayuda a recuperarnos más rápido para encarar próximos entrenamientos.
❱❱❱ Compression (Compresión)
Cuando hablamos de compresión, nos referimos a comprimir la zona lesionada (sin apretar demasiado que corte la circulación) con un vendaje de compresión para reducir al mínimo la hinchazón.
❱❱❱ Elevation (Elevación)
Consiste en elevar la zona lesionada por encima del nivel del corazón (siempre que esto no cause un aumento en el dolor) durante tanto tiempo como sea posible para minimizar el sangrado y la hinchazón.
SITUACIONES EN LAS QUE EL RICE NO SIRVE
El método no se recomienda para tratar huesos rotos o lesiones más graves en los tejidos blandos.
Estos pueden requerir medicación, cirugía o terapia física extensa.
ATENCIÓN
Cabe resaltar que con la descripción de estas técnicas no queremos alentarte a que no visites a un profesional médico.
Lo interesante de estas técnicas es que pueden ser utilizadas luego de entrenamientos donde quedamos realmente exhaustos y pueden ayudarnos a tener una pronta recuperación para el día siguiente.
TRUCOS PARA LA APLICACIÓN DEL HIELO
El hielo puede ser muy efectivo para la recuperación post esfuerzo y es muy usado en forma terapéutica para en torceduras, esguinces, hematomas, golpes, tendinitis y muchas otras situaciones dolorosas.
El poder analgésico del hielo (o el agua a muy bajas temperaturas) es indiscutible y la posibilidad de aplicarlo en forma local (donde sientes el dolor) es una ventaja frente a drogas analgésicas/anti-inflamatorias.
Aunque en los últimos tiempos han aparecido los famosos geles fríos y algunas otras alternativas, lo cierto es que nada le gana a la aplicación del hielo.
El hielo no tiene costo extra, y ofrece temperaturas más bajas y duraderas que los geles (se derriten con facilidad y cuantos más los usas, menos duran).
Sin embargo, la aplicación de cubitos de hielo en determinadas zonas del cuerpo puede ser incómoda e inconveniente, y por ello, te daremos tres trucos para aplicar hielo que seguro te servirán.
USA VASOS DE POLIESTIRENO EXPANDIDO
Para que nuestros lectores no se asusten, este vaso es sumamente conocido por todos.
Es el típico vaso de material térmico y descartable que se utiliza para beber bebidas calientes como café o té.
El poliestireno expandido es el conocido tergopol (en Argentina). poliexpan (en España), unicel hielo seco (en México) y con otros nombres en otros tantos países.
El vaso de poliestireno expandido puede ser de gran ayuda para un corredor que desea realizar una buena sesión de masajes fríos.
El truco será, congelar un vaso de poliestireno expandido con agua y una vez convertido en hielo cortar los bordes inferiores del vaso (1 cm de alto aproximadamente(.
El objetivo será que puedas masajear la zona dolorida sin congelarte las manos (que estarán en contacto con el vaso térmico) y el hielo que sobresale al vaso en contacto directo con la zona.
Con este truco podrás realizar masajes fríos en las zonas más agotadas luego de un entrenamiento duro o carrera (ideal para pantorrillas o cuadriceps) o apliques directamente en lesiones (como los esguinces de tobillo).
Cinco minutos de constante masajes en la zona serán suficiente para disfrutar de los beneficios del hielo (recuerda que estará en contacto directo y deseamos evitar dañar la piel).
TRITURA LOS CUBOS HIELOS
En muchos casos, la forma de los cubos de hielo es molesta, puede ser dolorosa y hasta puede ser incómoda de aplicar en tu cuerpo.
En estos casos, triturar los hielos (sin exagerar), ya sea con una licuadora o con la vieja técnica de los golpes, puede ser una solución.
Luego de ser triturados, bastará que coloques los hielos en una bolsa hermética para poder aprovechar los beneficios del hielo.
Al ser más pequeños que los cubos de hielo, es muy probable que duren menos. Asegúrate de no mojar nada en tu casa.
EL GRAN CUBO
Hay determinadas zonas del cuerpo (como los isquiotibiales o los glúteos) donde la aplicación de cubos de hielo es casi imposible.
La solución que hemos encontrado, es la creación de un gran cubo de hielo rectangular.
Para hacerlo, deberás llenar de agua un tupper o cualquier otro recipiente de plástico de aproximadamente 0.40 cm x 0.20 (medidas estimadas) y con una altura de aproximadamente 10 cm.
Una vez convertido en hielo (tardará unas cuantas horas), te recomendamos envolverlo bolsas, y luego aplicarlo sentándote sobre él ( en el caso de los glúteos) o colocarlo debajo de tu pierna en el caso de los isquiotibiales.