Falta muy poco para la Navidad! Descubre las 3 razones por las que debes salir a correr el 24 y 25 de diciembre! .
3 RAZONES PARA CORRER EN NAVIDAD
La Navidad es una de las festividades más importantes del cristianismo donde se conmemora el nacimiento de Jesucristo y se celebra el 25 de diciembre de cada año.
Ademas de los católicos, muchas personas sin importar la religión, utilizan esta fecha para reunirse en familia, celebrar y comer (y en muchos casos beber) mucho.
Dependiendo el país en el que vivas, hay diversas tradiciones, están aquellos que tienen una gran cena la noche del 24 de diciembre (y el 25 comen los restos) y aquellos que celebran únicamente el 25 de diciembre, pero lo que caracteriza a cualquiera de estos festejos es la abundancia de comida.
En Runfitners creemos que estos festejos no impiden que salgamos a correr y queremos darte las 3 razones por las que tendrías que correr el 24 y 25 de diciembre:
1.- Quemarás calorías
Ya lo dijimos, en estas fiestas se come y mucho, y correr es una excelente forma de evitar sumar algunos kilos de mas.
Si vas a comer y/o comiste realmente demasiado, quizás te convenga utilizar algunas de estas técnicas para quemar mas calorías mientras corres.
Si no bebiste alcohol, realizar un fondo puede ser una excelente opción, después de todo, seguramente tienes mucho combustible almacenado en tu cuerpo como para realizar un entrenamiento duro.
Si tienes pensado hacer esto, antes de correr dale a tu cuerpo el tiempo suficiente para digerir lo que hayas comido.
2.- Te ayudará a desintoxicarte
Si bebiste alcohol y comiste alimentos muy pesados y te sientes realmente agotado, correr a un ritmo relajado durante 20/30 minutos puede ayudarte a sentirte mejor.
Si has bebido mucho en las celebraciones, recuerda que el alcohol deshidrata, así que bebe mucho líquido, antes, durante y después de entrenar.
3.- Te ayudará a minimizar los efectos «engordantes» de las fiestas
Los excesos alimentarios suele ser una de las conductas que más se repiten en muchísimas personas (que luego padecen sus consecuencias) y afortunadamente el ejercicio físico puede contrarrestar algunos de sus inconvenientes.
La combinación de excesos alimentarios e inactividad física, es una mezcla que puede ser dañina para la salud y la imagen corporal de cualquier persona.
En un Estudio se intentó evaluar los efectos de la actividad física en momentos de excesos alimentarios puntuales (cómo pueden ser los momentos de fiestas y celebraciones).
Para ello, se analizaron a 26 hombres jóvenes que durante siete días realizaron una ingesta excesiva de alimentos sin actividad física o incluyendo 45 minutos diarios corriendo en cinta.
Para igualar el mismo excedente de calorías diarias , el grupo de inactivos aumentó su consumo de calorías en un 50 por ciento, mientras que el grupo activo aumentó su consumo de calorías en un 75 por ciento.
Los efectos de comer en exceso durante siete días fueron significativas:
- Los participantes de ambos grupos (activos e inactivos) sufrieron un incremento de la masa corporal, circunferencia de la cintura y cadera.
- La cantidad de grasa corporal y abdominal y la presión sanguínea también se incrementó en ambos grupos.
Aunque queda claro que los excesos alimentarios produjeron efectos negativos para ambos grupos, el estudio encontró que tales efectos fueron mucho más bajos en el grupo que realizó actividad física diariamente.
Sin dudas, este es otro de los tantos beneficios de correr para nuestra salud.
Por ello, en momentos donde sabemos que resulta realmente difícil evitar los excesos alimenticios, la mejor alternativa para contrarrestar sus efectos será no dejar de realizar actividad física.
CUESTIONES A TENER EN CUENTA
Si se prefiere aprovechar para darle un plus al entrenamiento, el fin de año es una época ideal.
Los días laborables libres por las festividades y las vacaciones dan la posibilidad de largos entrenamientos, preparación en el gimnasio o incluso sumar deportes complementarios como la natación o el ciclismo.
Además, el calendario de carreras se reduce bastante lo cual colabora con enfocarse sólo en entrenar.
Por otro lado, si se opta por darle prioridad a los eventos sociales o bien aprovechar el tiempo extra para estar más con la familia, no sería una mala idea hacer un descanso en el entrenamiento después de un año continuo de exigir el cuerpo.
Tomarse una o dos semanas de entrenamiento muy liviano, incluso de ausencia total del ejercicio, no perjudica en nada el desempeño que se pueda alcanzar a lo largo del año; de hecho, es muy beneficioso para recuperar física y psicológicamente el cuerpo al cien por cien, dejándolo listo para desarrollar su mayor potencial.
Es un temor muy común en amateurs, creer que una pausa completa en el entrenamiento producirá una baja de rendimiento, muchos incluso llevan años de ejercicio ininterrumpido.
Paradójicamente los atletas de elite, al contrario, no tienen ningún reparo en detenerse todo el tiempo que sea necesario, para poder reincorporarse a la actividad sin ningún limitante.
También, surge una tercera opción, aprovechar el tiempo libre, no para aumentar el entrenamiento, sino para compartirlo.
Al ser semanas del año relajadas, es más fácil coordinar horarios y salir a correr con amigos, familiares, pareja, compañeros de trabajo y conocidos y, hasta, sumarse con gente que comúnmente entrena en el mismo lugar y, todavía, no se conoce.
Más aún, incorporar personas nuevas al running, puede ser una experiencia muy motivadora al permitirnos compartir la enorme satisfacción del que está dando los primeros pasos.
Todas las opciones son buenas y, hasta, puede haber muchas otras; pero, quizás lo más importante es definirse por una. Por ejemplo, quedar a mitad de camino, entrenar mal anhelando hacerlo bien, no permite disfrutar ni el entrenamiento ni el descanso.
Se puede elegir de lleno una opción para descubrirla plenamente y, al año siguiente, inclinarse por la otra para evaluar cual se disfruta más.
Otra situación común por estos días es que la suma de eventos vinculados con la comida haga crecer los dígitos de la balanza, repercutiendo negativamente en los entrenamientos, no sólo por la cantidad de comida, sino también por la calidad.
Paradójicamente, a veces correr puede ser contraproducente en estos casos.
No desde lo físico, sino desde lo psicológico, ya que puede ser una excusa permanente para cualquier tipo de excesos, con la errónea idea de que luego todo se gasta corriendo.
Sin duda que no es así, sólo un ejemplo: el gasto energético de 40 minutos de trote es igual a un cuarto de kilo de helado cremoso.
Como siempre, el equilibrio es primordial, para poder disfrutar tanto de los trotes como de la comida en forma plena.
Sumergidos en una hermosa época del año, disfrutar plenamente, no sólo del running, sino de cada actividad, puede ser la clave para iniciar un gran año nuevo.
DOS ENTRENAMIENTOS IDEALES PARA NO ENGORDAR EN NAVIDAD O AÑO NUEVO
Entrenamiento para climas cálidos
En muchos países, estas celebraciones se realizan en medio de climas realmente calurosos y donde salir a correr es un verdadero desafío.
Para estos días caluroso, te proponemos un entrenamiento corto pero intenso, que hará que quemes mas calorías y así intentar que no te afecten tanto aquellas que consumes de mas en las comidas de estas fiestas.
Te recomendamos que si en tu ciudad hacen temperaturas realmente elevadas, intentes realizar este entrenamiento por la mañana (muy temprano) o a última hora (antes de las cenas festivas).
Te sugerimos que lo hagas por la mañana para evitar las temperaturas mas altas y para asegurarte que tus obligaciones y la planificación de los festejos, te impidan correr después.
Si tus festejos serán por la noche y eres lo suficientemente organizado cómo para tomarte un rato para entrenar 1 hora antes de la cena, puede ser una alternativa perfecta, ya que todo lo que comas será utilizado por tu cuerpo para recuperarte más rápido.
El entrenamiento que te recomendamos consistirá en 8 series de 400 metros a un ritmo similar a la velocidad máxima a la que puedes correr por 2 kilómetros. Para determinarlo en forma simple, utiliza la calculadora Mc Millan.
Antes de cada sesión de entrenamiento, realiza un buen calentamiento que incluya un trote suave de al menos 10/15 minutos.
Al terminar no olvides realizar tus estiramientos y comienza a trabajar en tu recuperación.
Entrenamiento para climas fríos
Para aquellos que corren en climas fríos, el día de navidad y/o año nuevo, puede ser un día perfecto para realizar un buen entrenamiento de fondo, donde tengamos tiempo de disfrutar los kilómetros y por qué no, reflexionar sobre nuestro año y nuestros logros deportivos.
Un entrenamiento de fondo adecuado, te ayudará a quemar una buena cantidad de calorías y te permitirá darte algún gusto extra, sin preocuparte demasiado.
Para evitar quedar muy cansados y tener tiempo suficiente para estar recuperados, te recomendamos que este entrenamiento sea realizado por la mañana y reduzcas levemente la cantidad de kilómetros que sueles realizar.
En cuanto al entrenamiento en sí, te recomendamos que elijas cualquiera de estas variantes de fondos.